Una época de cambios
Las dos Guerras Mundiales, la crisis de los valores de la Ilustración y el 'fracaso' de la confianza en la razón y el progreso produjeron en el siglo XX la pérdida del optimismo como rasgo social y cultural más relevante.
Por otro lado la aparición de las vanguardias y de la posmodernidad llevaron a un relativismo moral y cultural que coloca a la sociedad occidental en una crisis profunda.
También apareció con gran fuerza la cultura de masas, fruto de la pujanza de los medios de comunicación de masas y de la importancia de la llamada 'cultura del ocio'
Todo esto llevó a la innovación en el ámbito del arte y la literatura, buscando nuevos lenguajes, nuevas formas que pudieran reflejar el espíritu de los tiempos en los que se producía.
Los cambios rápidos y continuos llevaron a su vez a la desaparición de los movimientos o tendencias globales que habíamos tenido hasta el siglo XIX. Ya no cabe hablar de épocas que abarcaran a todos los movimientos artísticos sino de autores u obras que marcaron nuevos caminos.