Los humedales singulares protegen, exclusivamente, los ibones del Pirineo.
Las figuras de protección de la naturaleza surgieron por la necesidad de conservar algunas zonas singulares de las actividades humanas.
En las zonas cercanas a los árboles singulares queda prohibida la caza.
El Parque Nacional de Ordesa y Monteperdido fue el primer espacio natural protegido de España.
