Más que palabras III
Al hablar o leer hacemos pausas breves, que es lo que representa la coma en la lengua escrita. En ocasiones también se utiliza para distribuir sintácticamente un enunciado.
Señala una pausa más intensa que la de la coma pero inferior a la marcada por el punto. La primera palabra que sigue al punto y coma debe escribirse siempre con minúscula.
Se suele utilizar en estos casos como los siguientes:
Para separar dos o más sintagmas de un enunciado cuand éste ya incluye comas. Por ejemplo: A mi madre le encantan las hortensias; a mi padre, las gardenias; a mi hermana, las rosas; y a mí, las margaritas.