La Edad Media: el feudalismo y el Islam
La Corona de Aragón
Alfonso II fue el primer monarca de la Corona de Aragón, integrada por el reino de Aragón y el condado de Barcelona, dos entidades unidas bajo un mismo trono, pero con autonomía propia.
Su hijo, Pedro II, unió a la Corona de Aragón el tercio sur de Francia, que le correspondía por su madre, Leonor de Aquitania. Defendiendo estas tierras, de mayoría cátara, contra la cruzada papal, murió y dejó heredero a Jaime I, todavía niño.
A los 21 años conquistó la taifa de Mallorca y nueve años más tarde la de Valencia, ambos fueron nuevos reinos dentro de la Corona de Aragón, lo que le enfrentó a la nobleza que reclamaba sus derechos.
Sus sucesores continuaran la expansión por el Mediterráneo: Pedro III conquistará Sicilia (y la taifa de Albarracín en la península), Jaime II anexionará Cerdeña y los ducados de Atenas y Neopatria (con los almogáraves) y Alfonso V (perteneciente a la nueva dinastía de los Trastámara) conquistará Nápoles.
Organización de la Corona de Aragón
La estructura de la Corona de Aragón es peculiar, al tratarse de una confederación de estados bajo un mismo trono, cada uno de los territorios que la conformaban tenían una organización propia, como propias eran las instituciones y costumbres. Cada uno de los territorios tenía sus propias cortes y, en ocasiones se reunieron Cortes Generales a las que acudían fundamentalmente de Cataluña, Aragón y Valencia, ocasionalmente, de Mallorca.
En este mapa, obtenido de la Gran Enciclopedia Aragonesa puedes ver los territorios vasallos de la Corona de Aragón en el sur de Francia.