Ciencias de la Naturaleza
3º - Ciencias de la Naturaleza
2.6 La química en la vida cotidiana

Química y medio ambiente
 
Uno de los retos fundamentales con los que se enfrenta la humanidad son los problemas medioambientales, que afectan directamente a la salud de las personas y a nuestro ecosistema. La química se encarga de buscar las causas y posibles soluciones a estos problemas.
 
Dentro de esta categoría de química medioambiental podemos distinguir cuatro lineas de acción:
  1. Química atmosférica. Trata temas como la reducción de la capa de ozono, el efecto invernadero o la lluvia ácida. Todos ellos relacionados con la contaminación atmosférica, con el objetivo de  descubrir nuevas técnicas que permitan evitar o al menos disminuir las emisiones de gases nocivos.
  2. Química de los residuos. Ha tomado gran importancia con la sensibilización social respecto al reciclaje. El aumento del consumo lleva asociado la producción de un gran número de residuos contaminantes, la química investiga las posibilidades de reciclaje de los mismos y, en caso de no ser posible, la eliminación segura de los mismos.
  3. Química del agua. El crecimiento de la población mundial y el desarrollo industrial provoca que el agua, necesaria para la vida, sea cada vez más escasa y de peor calidad. En este aspecto se estudia la mejora en los procesos de potabilización y, sobre todo, en la depuración de aguas residuales que mejoren el estado de nuestros ríos y mares.
  4. Química del suelo. Los vertidos incontrolados de residuos, el uso excesivo de fertilizantes y pesticidas, provoca la degradación de los suelos, volviéndolos no aptos para el cultivo, pues pasarían a la cadena alimentarias los contaminantes. La química busca tecnologías que permitan la recuperación rápida del suelo.
Relaciona
Relaciona los siguientes términos con el problema medioambiental asociado
Lluvia ácida
Depuración
Reciclaje
Pesticidas
Degradación de suelos
Aguas no potables
Residuos contaminantes
Contaminación atmosférica


Lluvia ácida

La lluvia ácida son las precipitaciones en forma de lluvia, nieve o niebla con un pH ácido (inferior a 5,6). Se produce por hidratación de los óxidos de azufre o nitrógeno procedentes de las combustión de los combustibles fósiles.
Su principal afección es aumentar el grado de acidez de las aguas superficiales, aunque también daña los bosques y aumenta la erosión de los monumentos y edificios.
Para prevenir la lluvia ácida, aparte de reducir el consumo de los combustibles fósiles, se instalan dispositivos que evitan la emisión de estos óxidos de azufre y/o nitrógeno, como los catalizadores que los automóviles están obligados a llevar desde hace algunos años.

lluvia_acida